lunes, 14 de enero de 2008

Un año empieza... Y seguimos...

No escribo mucho en este blog, lo reconozco... pero el petirrojo me disculpa: sabe que no dejamos de hacer cosas y no escribir no significa que no ocurra "nada." Es más, están ocurriendo muchas cosas... y, precisamente por eso, dispongo de poco tiempo para las crónicas "petirrojeras."
De todos modos, no quiero poner "nada" que no sea "oficial" pero si quiero anotar en este blog un sentimiento. Para no olvidarlo.
Hace un par de dias vi una película protagonizada por Angelina Jolie y Clive Owen. Se llama "Amar peligrosamente" y es la relación, amorosa, entre una mujer británica de posición social "conservadora", casada, con un hijo y que trabaja para la ONU y un médico que está constantemente en frentes conflictivos como Camboya, Bosnia... ayudando a refugiados. A parte de la historia de amor, la película -que influyó a Angelina Jolie para empezar a colaborar de lleno con ACNUR- te sitúa plenamente en la realidad que sufren tantos inocentes por la estupidez de tantos imbéciles...
Al verla, recuperé de golpe, la energía del petirrojo.
A veces me "baja" la intensidad o pierdo la conexión con esa energía que te hace sentir la posibilidad, real, de un mundo mejor. Esa energía que te lleva a actúar, a hacer algo, por poco que sea, para ayudar en este planeta.